Hace exactamente veinte años, un 16 de octubre de 2004, el fútbol mundial fue testigo del nacimiento de una leyenda. Con solo 17 años, tres meses y 22 días, un joven rosarino llamado Lionel Messi hacía su debut oficial con el primer equipo del FC Barcelona, en un derbi catalán frente al Espanyol. Aquel día, el dorsal «30» ingresó al minuto 82 de partido, sustituyendo al portugués Deco, y aunque su participación fue breve, los pocos toques de balón ya dejaban entrever destellos de un talento extraordinario que, con el tiempo, redefiniría los límites del deporte.
El Camp Nou, escenario de aquel hito, no sabía que estaba presenciando el inicio de una era. Messi, quien venía deslumbrando en las categorías inferiores del club y ya había debutado en un amistoso previo ante el Porto, era la joya de La Masia. Su irrupción, aunque silenciosa en aquel momento, era el resultado de un proceso de formación meticuloso y de una visión que el Barcelona tuvo al apostar por un chico de tan corta edad y enorme potencial.
Aquel partido, que el Barcelona ganó 1-0 con gol de Deco, fue apenas el preludio de una trayectoria sin igual. La Pulga, como sería conocido, se convertiría en el máximo goleador histórico del club, el jugador con más títulos, más asistencias y un sinfín de récords que lo elevarían al olimpo del fútbol. Su zurda mágica, su regate inigualable y su capacidad goleadora lo transformarían en un ícono global, transcendiéndo las fronteras de Argentina y España.
El impacto de Messi en el FC Barcelona y en el fútbol argentino es incalculable. Con el club catalán, conquistó 35 títulos, incluyendo 10 Ligas españolas y 4 Ligas de Campeones de la UEFA, marcando una época dorada. Para Argentina, su figura se consolidaría con la obtención de la Copa América 2021 y, finalmente, la ansiada Copa del Mundo en Catar 2022, un logro que lo instaló definitivamente como el mejor futbolista de todos los tiempos para muchos.
El 16 de octubre de 2004 no fue solo un día de partido; fue la jornada en que se encendió la chispa de una de las rivalidades más fascinantes de la historia del deporte, la que protagonizaría con Cristiano Ronaldo, y la fecha en que comenzó la forja de un legado que perduraría por décadas. Las imágenes de aquel adolescente de melena larga, ingresando con timidez pero determinación, son hoy un símbolo de perseverancia y genialidad.
Dos décadas después, Lionel Messi sigue maravillando en el Inter Miami de la MLS. Su debut, aquel lejano 16 de octubre, es un recordatorio de cómo un momento aparentemente pequeño puede ser el punto de inflexión para una carrera monumental y una fuente de inspiración para millones de jóvenes que sueñan con emular su magia.
