El reconocido analista financiero Salvador Di Stefano, apodado el «Gurú del blue», pronosticó una caída en el precio del dólar paralelo en Argentina, con la posibilidad de que la cotización rompa el piso de los $1100. Esta proyección, que ha llamado la atención de inversores y ahorristas, se basa en una serie de factores económicos y políticos que, según Di Stefano, generarán una presión a la baja en los dólares financieros en las próximas semanas.
En una reciente entrevista, Di Stefano explicó que la tendencia a la baja en el valor del dólar blue se debe, en parte, a un contexto de mayor estabilidad cambiaria producto de la intervención del Banco Central en los mercados financieros. «El Gobierno ha logrado contener las expectativas de devaluación a corto plazo, y eso ha generado un efecto positivo sobre los tipos de cambio paralelos», señaló el especialista. A su juicio, esta situación, sumada a una menor demanda de dólares por parte del sector privado, podría empujar al dólar blue por debajo de los $1100.

Otro de los motivos que Di Stefano destacó fue el flujo de divisas proveniente de las exportaciones del sector agropecuario, que ha aumentado en los últimos meses. «Con el ingreso de dólares provenientes del campo y las liquidaciones, hay más oferta en el mercado, lo que contribuye a aliviar la presión sobre la divisa», explicó. Este fenómeno, según el analista, es temporal, pero suficiente para provocar una corrección en el tipo de cambio.
A pesar de su pronóstico optimista a corto plazo, Di Stefano también advirtió sobre posibles reversiones si las políticas monetarias del Gobierno no se mantienen. «Este escenario puede cambiar rápidamente si el Banco Central decide flexibilizar el cepo cambiario o si hay incertidumbre política en el futuro cercano», señaló. No obstante, por el momento, estima que la cotización del dólar blue tiene margen para seguir bajando antes de enfrentar una nueva oleada de aumentos.
Uno de los factores claves para este descenso, según el especialista, ha sido la decisión del Gobierno de reforzar los controles cambiarios y mantener las tasas de interés elevadas. Estas políticas han desincentivado la compra de dólares, tanto en el mercado oficial como en el paralelo. «El ahorro en pesos se ha vuelto más atractivo debido a las altas tasas, y eso también ha contribuido a una menor presión sobre el dólar blue», explicó Di Stefano.
Por otro lado, los mercados financieros están evaluando con cautela los resultados de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Si bien la relación entre el Gobierno y el organismo ha sido tensa en el pasado, las recientes señales de colaboración podrían generar mayor confianza entre los inversores y fortalecer la estabilidad cambiaria en el corto plazo.

A medida que se acerca el cierre del año, Di Stefano cree que las elecciones generales y la formación del próximo Gobierno también jugarán un rol determinante en la evolución del tipo de cambio. «Si el próximo Gobierno implementa un plan económico coherente y logra restaurar la confianza de los mercados, podríamos ver una continuidad en la baja del dólar blue», afirmó.
Sin embargo, el analista no descarta que, en un escenario de mayor incertidumbre o crisis política, el dólar vuelva a subir con fuerza. «El mercado cambiario es volátil y depende de múltiples factores. Si las expectativas de devaluación se reactivan, podríamos ver nuevamente al dólar blue superar los niveles actuales. Pero por ahora, todo indica que puede romper el piso de los $1100», concluyó Di Stefano.