El calendario futbolístico se reactiva para Boca Juniors en medio de un clima de profundo luto institucional tras el reciente fallecimiento de Miguel Ángel Russo. Luego de que la AFA postergara el encuentro que debía disputarse este fin de semana ante Barracas Central, el plantel Xeneize se prepara para su regreso a la competición, marcando un punto de inflexión emocional y el inicio de un nuevo ciclo interino.
El primer compromiso oficial tras la sensible noticia tendrá lugar el sábado 18 de octubre, cuando Boca reciba a Belgrano de Córdoba en La Bombonera por la 13ª fecha del torneo. Este partido no solo es crucial para la meta de la clasificación a la Copa Libertadores 2026, sino que también se espera que sea una jornada de tributo colectivo a la memoria del director técnico, una de las figuras más queridas y respetadas del fútbol nacional.
La dirección técnica recaerá en Claudio Úbeda, quien asumirá como entrenador interino hasta la finalización de la actual temporada. Úbeda afronta el desafío inmediato de recomponer la estructura y el ánimo de un grupo visiblemente afectado por la pérdida, mientras simultáneamente busca los resultados necesarios para asegurar los objetivos del equipo en la liga y la posible clasificación a las fases finales.
En el plano estrictamente deportivo, Boca contará con el reingreso de Leandro Paredes. El mediocampista, que se encuentra con la Selección Argentina en Estados Unidos disputando partidos amistosos, tiene previsto reincorporarse al plantel a mitad de la próxima semana. Paredes se perfila como una pieza fundamental en el debut de Úbeda, buscando aportar control y creatividad en el mediocampo ante un rival que se presenta como bien organizado.
El aplazamiento del encuentro ante Barracas Central permitió a la institución concentrarse en el homenaje a Russo, culminado con el emotivo velatorio en el estadio. La carga emotiva que se prevé para el enfrentamiento ante Belgrano es ineludible. Según fuentes del club, el evento trascenderá lo deportivo, buscando transformar La Bombonera en un masivo altar de recuerdo y reconocimiento para el estratega que conquistó la Copa Libertadores de 2007.
La gestión interina de Úbeda y el partido contra Belgrano serán el termómetro del futuro inmediato de Boca. El equipo buscará honrar el legado de Russo a través de su desempeño, combinando la imperiosa necesidad de sumar puntos con el inevitable peso de la emoción. Las próximas semanas no solo definirán el rumbo del Xeneize en el campeonato, sino también los criterios para la selección del proyecto técnico de largo plazo.