El Gobierno de Bolivia ha manifestado su preocupación ante el reciente anuncio de Argentina sobre la instalación de un alambrado de 200 metros en la frontera compartida entre ambos países. Mediante un comunicado oficial, el Ministerio de Relaciones Exteriores boliviano enfatizó que «cualquier medida unilateral puede afectar la buena vecindad y la convivencia pacífica entre pueblos hermanos».
La construcción de este alambrado, que se extiende desde las vías del antiguo ferrocarril Belgrano hasta la avenida Bolívar en la ciudad fronteriza de La Quiaca, tiene como objetivo principal desalentar el paso por lugares no habilitados y encauzar el tránsito de personas y mercancías por los puntos oficiales de control. Según el titular de la Agrupación IX de Gendarmería Nacional en Jujuy, Raúl Contreras, «la alambrada tiene la finalidad de brindar mayor seguridad a la zona».
Esta iniciativa ha generado diversas interpretaciones. Mientras que autoridades argentinas sostienen que la medida busca regular el paso de mercancías y fortalecer la seguridad fronteriza, sectores de la oposición boliviana sugieren que la construcción del alambrado podría estar relacionada con esfuerzos para combatir el narcotráfico y el contrabando en la región.
No es la primera vez que se implementan medidas de este tipo en la frontera entre Bolivia y Argentina. En noviembre de 2015, se reportó la instalación de un alambrado de aproximadamente mil metros en la misma área fronteriza, con objetivos similares de seguridad y control del tránsito ilegal.
Además, en agosto de 2024, se registraron enfrentamientos entre la Gendarmería argentina y ciudadanos bolivianos en la frontera, específicamente en el barrio Santa Clara de La Quiaca. Estos incidentes llevaron a un refuerzo de los controles fronterizos por parte de ambos países, evidenciando la persistente tensión en la zona debido al contrabando y otros delitos transnacionales.
El Gobierno boliviano ha instado a su par argentino a buscar soluciones conjuntas y consensuadas para abordar los desafíos en la frontera, enfatizando la importancia de mantener el diálogo y la cooperación bilateral para garantizar la seguridad y el bienestar de ambas naciones.