El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ha anunciado el inicio de la licitación para la construcción de la Línea F del subterráneo, marcando la primera expansión de la red en un cuarto de siglo. Esta nueva línea conectará los barrios de Barracas y Palermo, abarcando un recorrido de 9 kilómetros y 11 estaciones. El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, destacó la magnitud del proyecto, calificándolo como «el legado más importante» para la ciudad.
La construcción de la Línea F se dividirá en dos etapas. La primera fase incluirá seis estaciones: Brandsen, Constitución, Cochabamba, Chile, Congreso y Tucumán. Esta etapa inicial se centrará en el tramo entre Barracas y la conexión con la estación Callao de la Línea D, en Balvanera, considerada de alta demanda potencial. La segunda fase completará las cinco estaciones restantes, extendiendo el servicio hasta Palermo. Se estima que la línea transportará a más de 300.000 pasajeros diarios, mejorando significativamente la conectividad norte-sur y descongestionando la Línea C.
El cronograma oficial prevé que la licitación nacional e internacional se lance en junio de 2025, con el inicio de las obras programado para 2026 y la puesta en funcionamiento en 2031. La inversión estimada para la primera etapa es de 1.050 millones de dólares, incluyendo la adquisición de material rodante. La línea estará equipada con tecnología de última generación, sistemas avanzados de señalización y coches nuevos con aire acondicionado. Además, se construirá una cochera y un taller para el mantenimiento de los trenes.
Este proyecto se enmarca en un plan más amplio de renovación del sistema de transporte público de la ciudad. El gobierno porteño ha anunciado la compra de 214 nuevos vagones para las líneas A, B y C, con una inversión de aproximadamente 370 millones de dólares, la más significativa en la última década. Paralelamente, se están llevando a cabo obras de modernización en 16 estaciones, incluyendo Lima (Línea A), Pueyrredón (Línea B) y Palermo (Línea D), con próximas intervenciones en Uruguay, Carlos Gardel y Malabia (Línea B), entre otras.
Además de la expansión del subte, se implementarán dos nuevas líneas de TramBUS eléctrico, un sistema de transporte que combina la eficiencia del subte con la flexibilidad del Metrobus. Estas líneas, que comenzarán a operar en 2026 y 2027, conectarán de manera transversal los barrios del norte y sur de la ciudad, utilizando carriles exclusivos y semáforos sincronizados para reducir los tiempos de viaje en un 40%. El TramBUS 1 (T1) recorrerá desde la Costanera, a la altura del Aeroparque, hasta el Centro de Trasbordo Sáenz, mientras que el TramBUS 2 (T2) conectará Belgrano C con San Pedrito, beneficiando directamente a más de 60.000 usuarios diarios.
El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, enfatizó que estas iniciativas buscan modernizar y mejorar la experiencia de los usuarios del transporte público en Buenos Aires. «Estamos comprometidos en ofrecer soluciones innovadoras que conecten nuevos barrios y faciliten los desplazamientos en la ciudad», afirmó. Con la implementación de la Línea F y las nuevas líneas de TramBUS, se espera una transformación significativa en la movilidad urbana, promoviendo un transporte más eficiente, sostenible y accesible para todos los porteños.