Un hombre de 50 años fue condenado a tres años de prisión condicional por haber usado undocumento de identidad adulterado, con la foto propia pero los datos de otra persona, para solicitar préstamos, gestionar tarjetas y comprar electrodomésticos en distintos comercios de Córdoba. De acuerdo a la sentencia del Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOCF) N°2 cordobés, la maniobra le permitió adquirir productos y servicios por decenas de miles de pesos, generando deudas a nombre de la víctima, quien descubrió las múltiples estafas al recibir reclamos por operaciones que nunca había realizado.