El Poder Ejecutivo anunció oficialmente que vetará cualquier proyecto de ley que implique un aumento jubilatorio por fuera del esquema fiscal previsto, en referencia directa a la iniciativa impulsada por el kirchnerismo, Miguel Ángel Pichetto y bloques de izquierda. La decisión fue comunicada por el vocero presidencial Manuel Adorni, quien calificó la propuesta como “inviable y demagógica”.
El proyecto, que obtuvo media sanción en Diputados, contempla una fórmula de actualización automática de haberes superior a la inflación, con un refuerzo adicional del 8,1%. Desde la oposición aseguran que se trata de una medida para recomponer el poder adquisitivo de los jubilados frente a la aceleración inflacionaria y la pérdida de ingresos reales en el último año.
El oficialismo sostiene que la iniciativa representaría un gasto adicional de 0,43% del PBI y que afectaría el equilibrio fiscal. “No vamos a convalidar un aumento irresponsable que arruine el equilibrio presupuestario. El Presidente ya lo dijo: se vetará todo lo que ponga en riesgo la estabilidad económica”, afirmó Adorni durante la conferencia de prensa matutina.
Desde la oposición, Pichetto defendió el proyecto señalando que “el Estado tiene la obligación moral de asistir a los jubilados que hoy están debajo de la línea de pobreza”. Por su parte, representantes de la izquierda denunciaron un “ajuste brutal” y acusaron al gobierno de priorizar los pagos al FMI por encima de las necesidades sociales.
La discusión se da en un contexto de fuerte ajuste fiscal promovido por la administración actual, que busca alcanzar el equilibrio de las cuentas públicas antes de fin de año. Organizaciones de jubilados y movimientos sociales convocaron a movilizaciones frente al Congreso en señal de repudio al veto anticipado.
El enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición en torno al sistema previsional anticipa un clima de creciente conflictividad parlamentaria y social. A futuro, el debate sobre cómo garantizar ingresos dignos sin comprometer las cuentas públicas continuará siendo uno de los grandes dilemas del modelo económico argentino.