En la era digital, las aplicaciones móviles han transformado la manera en que interactuamos con la tecnología, pero muchas de ellas recopilan y comparten datos personales sin que los usuarios sean plenamente conscientes. Desde información de ubicación hasta hábitos de navegación y contactos, estas apps pueden representar un riesgo para la privacidad. Un reciente estudio reveló cuáles son las aplicaciones más invasivas y qué hacen con los datos que obtienen.
Entre las aplicaciones que más información recolectan se encuentran redes sociales como Facebook, Instagram y TikTok, junto con plataformas de mensajería como WhatsApp. Estas apps acceden a datos como la ubicación en tiempo real, el historial de navegación, las interacciones con otros usuarios y hasta el uso del micrófono y la cámara. En muchos casos, esta información es utilizada para mejorar la personalización de anuncios y experiencias dentro de la plataforma, pero también puede ser compartida con terceros.
Un aspecto preocupante es que algunas aplicaciones recopilan información incluso cuando no están en uso. Por ejemplo, TikTok ha sido señalada por analizar el comportamiento del usuario a través del movimiento de la pantalla y el tiempo de permanencia en cada video. De manera similar, Google Maps registra constantemente la ubicación del usuario, aunque la aplicación esté cerrada, y aplicaciones de compras como Amazon y Shein almacenan historiales de búsqueda y preferencias de consumo.
Las empresas justifican esta recolección de datos argumentando que es necesaria para mejorar la experiencia del usuario y ofrecer contenido relevante. Sin embargo, expertos en ciberseguridad advierten que la falta de transparencia sobre el uso de esta información puede derivar en violaciones a la privacidad. En algunos casos, los datos pueden ser vendidos a anunciantes o utilizados para la creación de perfiles detallados de los usuarios sin su consentimiento explícito.
Para reducir los riesgos, los especialistas recomiendan revisar los permisos que cada aplicación solicita al momento de la instalación y restringir aquellos que no sean esenciales. También es aconsejable utilizar versiones alternativas de algunas aplicaciones que ofrecen mayor privacidad, como Signal en lugar de WhatsApp o DuckDuckGo en reemplazo de Google. Mantener el software actualizado y activar configuraciones de seguridad adicionales, como la autenticación en dos pasos, también puede ayudar a proteger los datos personales.
A medida que la conciencia sobre la privacidad digital crece, gobiernos y organismos de protección de datos están comenzando a implementar regulaciones más estrictas para limitar el acceso de las empresas a la información personal de los usuarios. No obstante, la responsabilidad final recae en los propios usuarios, quienes deben tomar medidas para resguardar su privacidad en un mundo cada vez más interconectado.