El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación de marzo fue del 3,7%, acumulando un 55,9% en los últimos doce meses. Este incremento mensual es el más alto desde septiembre de 2024 y supera las proyecciones de analistas que estimaban un 2,6%.
El rubro «Educación» lideró los aumentos con un 21,6%, seguido por «Alimentos y bebidas no alcohólicas» con un 5,9%. Factores estacionales, como el inicio del ciclo lectivo y el alza en frutas y verduras, contribuyeron significativamente a este aumento.
A pesar de este repunte, el gobierno destaca que la inflación interanual muestra una tendencia a la baja, siendo la menor desde marzo de 2022. La política monetaria restrictiva y las reformas fiscales implementadas han contribuido a esta desaceleración.
El acuerdo con el FMI por $20.000 millones busca fortalecer las reservas del Banco Central y reducir la inflación a mediano plazo. Sin embargo, la reciente liberalización del mercado cambiario podría generar nuevas presiones inflacionarias si no se gestiona adecuadamente.
Analistas señalan que, aunque la inflación muestra signos de desaceleración, aún persisten desafíos estructurales que requieren atención, como la indexación de precios y la necesidad de una política fiscal sostenible.
En conclusión, la inflación de marzo refleja tanto avances en la estabilización económica como los desafíos que aún enfrenta Argentina en su camino hacia una economía más equilibrada y predecible.















