La provincia del Chaco ha encendido las alertas ante la ausencia de convenios firmados por obras con el gobierno nacional en el proyecto de presupuesto para 2025. El ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Alejandro Abraam, trabaja intensamente con funcionarios del Ejecutivo Nacional para garantizar que estos acuerdos, pactados a lo largo de este año, sean finalmente materializados y contemplados en la planificación presupuestaria.
La presentación del presupuesto nacional, encabezada por el presidente Javier Milei, ha generado inquietud en varias provincias, incluido el Chaco, debido a la exigencia de una reducción del gasto extraordinaria. En particular, preocupa que una revisión más detallada del desglose de partidas revela la omisión de varios proyectos de infraestructura que la Nación había acordado con la provincia en 2023. Esto ha llevado a las autoridades chaqueñas a buscar mecanismos para reincorporar estos convenios en la planificación del próximo año.
Entre las obras comprometidas se encuentran proyectos clave para el desarrollo de la infraestructura en la región, como mejoras en rutas, construcción de viviendas y la ampliación de redes de agua y energía. Abraam expresó que “es fundamental que estos acuerdos se mantengan en pie, ya que están destinados a resolver problemáticas esenciales para la provincia”. Sin estas obras, advierten que el crecimiento y bienestar de varias comunidades del Chaco podrían verse comprometidos.

La negociación con el gobierno nacional no será sencilla, dado el contexto de ajuste fiscal que exige una reducción de gastos en las provincias de USD 20.000 millones, según lo anunciado por el presidente Milei. Este ajuste se presenta como un desafío no solo para el Chaco, sino para todas las jurisdicciones que dependen en gran medida de los fondos nacionales para financiar proyectos de infraestructura y servicios básicos.
El gobierno provincial teme que la falta de concreción de estos convenios pueda agravar la situación económica de la provincia. Muchos de los proyectos no solo mejorarían la calidad de vida de los chaqueños, sino que también generarían empleo y movilización económica. “No podemos permitir que el ajuste afecte de manera tan drástica a las provincias que ya enfrentan desafíos estructurales importantes”, señaló Abraam en una reciente conferencia de prensa.
Funcionarios chaqueños han iniciado contactos con el Ministerio de Economía y el Ministerio del Interior para garantizar que los acuerdos firmados se incluyan en el presupuesto definitivo que se debatirá en el Congreso. Las conversaciones buscan una solución que permita cumplir con los compromisos asumidos por el gobierno nacional sin afectar el plan de ajuste fiscal. Sin embargo, desde el gobierno nacional advirtieron que será difícil reincorporar todas las obras debido a las restricciones presupuestarias.
En paralelo, otros gobernadores de provincias del norte argentino también están siguiendo de cerca el debate presupuestario, ya que comparten la preocupación por la exclusión de obras claves en sus distritos. Las provincias menos desarrolladas temen que el ajuste fiscal recaiga de manera desproporcionada sobre ellas, profundizando las desigualdades regionales.
Las próximas semanas serán decisivas para el futuro de estos proyectos en el Chaco. El ministro Abraam confía en que las gestiones con la Nación permitan reactivar los acuerdos, aunque reconoce que será necesario encontrar un equilibrio entre las demandas de las provincias y las políticas de ajuste impuestas por el gobierno central.