Tras 28 días de internación y superar tres cirugías complejas a raíz de un grave accidente en moto, el exconcursante de Gran Hermano, Thiago Medina, ha recibido el alta médica del Hospital Mariano y Luciano de la Vega de Moreno. La noticia fue confirmada por su expareja y madre de sus gemelas, Daniela Celis, quien destacó el «milagro» de su recuperación. Las primeras palabras del joven al dejar el centro de salud reflejaron su profundo anhelo: «Lo que más quiero es ver a mis hijas», un mensaje de esperanza que resonó en el ambiente mediático.
La evolución de Medina, que en un momento requirió pasar por terapia intensiva, fue calificada de «muy favorable» por el comunicado oficial del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires. El parte destacó que el joven ya no requirió asistencia respiratoria mecánica ni sondas para recibir medicación, lo que marcó un hito en su recuperación física.
El proceso de mejoría fue seguido de cerca por la opinión pública y la comunidad de seguidores, quienes participaron activamente en cadenas de oración y mensajes de apoyo. Su entorno más íntimo, encabezado por Daniela Celis, mantuvo informados a los medios sobre cada avance, resaltando la labor «extraordinaria» de los profesionales del hospital que intervinieron quirúrgicamente y asistieron a Thiago durante casi un mes.
Más allá de la cuestión física, el retorno a casa marca el inicio de una nueva etapa de recuperación extrahospitalaria, crucial para su bienestar emocional. La ansiedad por el reencuentro con sus hijas, a quienes vio por primera vez a través de una videollamada mientras estaba en terapia intensiva, es el motor de su vuelta a la cotidianidad, según sus propias declaraciones al salir del nosocomio.
El caso de Thiago Medina trasciende el ámbito del espectáculo para convertirse en un ejemplo de resiliencia y la importancia del acompañamiento familiar y médico en situaciones críticas. Su recuperación es también un reconocimiento al sistema de salud bonaerense, que garantizó una asistencia integral durante el periodo de mayor vulnerabilidad.
Con el alta médica, ahora se abre un capítulo centrado en la rehabilitación y la reconstrucción de la vida familiar. Si bien Daniela Celis ha señalado que el futuro de su relación de pareja se definirá una vez superada la «vulnerabilidad» de la internación, la prioridad mutua sigue siendo el bienestar de sus hijas, consolidando su rol como padres en esta nueva fase.