El 2025 comenzó con incertidumbre para los multimillonarios más destacados del planeta. La caída en los mercados bursátiles, impulsada por la guerra comercial y la incertidumbre económica, ha afectado gravemente las fortunas de figuras como Elon Musk, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos. Musk, en particular, ha perdido más de la mitad de su patrimonio, una caída que resalta la volatilidad de las inversiones tecnológicas.
El principal afectado es el sector tecnológico, que lideraba el crecimiento en los últimos años. Con la recesión en el horizonte y la corrección de los mercados, las acciones de gigantes como Tesla, Amazon y Meta se han desplomado, dejando pérdidas millonarias. En total, los diez más ricos del mundo han visto esfumarse más de 392.000 millones de dólares, lo que equivale a casi el doble de la capitalización de Inditex.
Aunque la presidencia de Trump y sus políticas económicas han jugado un rol importante, las valoraciones infladas de las tecnológicas ya eran motivo de debate antes de su mandato. Las altas expectativas sobre la inteligencia artificial y las grandes innovaciones tecnológicas no han sido suficientes para evitar la corrección.
Entre los pocos que han esquivado la tormenta se encuentran Warren Buffett y Bernard Arnault, quienes han optado por una estrategia más conservadora. Mientras Buffett ha reducido su exposición a la bolsa, Arnault ha aprovechado la rentabilidad de las empresas europeas, que han sido más resistentes frente a la volatilidad.
Este fenómeno no solo afecta a los más ricos. Millones de ciudadanos que tienen sus ahorros o fondos de pensiones ligados a la bolsa también se ven perjudicados. Con la caída de Tesla, Elon Musk ha pasado de ser un ícono de la innovación a un blanco de críticas, especialmente por su vinculación política y las tensiones laborales en sus empresas.
La volatilidad actual es un recordatorio de cómo la riqueza puede desaparecer rápidamente en los mercados bursátiles, especialmente cuando el crecimiento está basado más en expectativas que en resultados tangibles.















