En una reciente declaración, el gobernador de Chaco, Leandro Zdero, vinculó al exgobernador Jorge Capitanich con lo que describió como una «sistemática y cruel campaña» de desprestigio contra su administración. Según Zdero, esta ofensiva mediática comenzó de manera «casual» poco después de la reaparición pública de Capitanich. «Es evidente que hay un intento de golpear al gobierno y desestabilizar la gestión. Y no es casual que esto ocurra justamente cuando el exgobernador reaparece en la escena política», afirmó Zdero.
El mandatario provincial fue enfático en señalar que la campaña de desprestigio tiene como fin socavar los avances logrados en su gobierno. Según Zdero, se ha detectado una estrategia coordinada que involucra tanto a medios de comunicación como a redes sociales, con el objetivo de sembrar desconfianza entre la población. «Las acusaciones y mentiras que se están difundiendo no solo buscan afectar mi imagen, sino también el trabajo arduo que estamos llevando adelante en favor de los chaqueños», subrayó el gobernador.

Zdero también mencionó que su administración ha sido objeto de una creciente cantidad de denuncias infundadas y publicaciones tendenciosas, muchas de ellas replicadas por sectores vinculados a la gestión anterior. «Es preocupante cómo se está utilizando la información de manera malintencionada, sin pruebas, para generar caos y confusión. Pero no vamos a permitir que esto nos desvíe de nuestro objetivo: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos», aseguró.
Por otro lado, el gobernador hizo referencia a algunos logros de su gestión que, según él, estarían siendo opacados por esta «campaña sucia». Entre ellos, destacó avances en la infraestructura provincial, programas de asistencia social y mejoras en áreas críticas como la salud y la educación. «Estamos trabajando para construir una provincia más justa y equitativa. Eso incomoda a quienes prefieren volver al pasado», sostuvo Zdero.
En cuanto a la figura de Capitanich, Zdero fue claro al afirmar que la intromisión del exmandatario en el escenario político actual no es meramente casual, sino parte de un plan más amplio para debilitar su gobierno. «No se trata solo de diferencias políticas. Es una estrategia orquestada para crear inestabilidad en el gobierno y frenar el progreso que hemos logrado hasta ahora», apuntó.
El actual mandatario chaqueño también hizo un llamado a la sociedad a no dejarse llevar por la desinformación y las falsas denuncias. «Sabemos que estamos en un contexto político difícil, pero confío en que los ciudadanos sabrán discernir la verdad de la manipulación. El pueblo chaqueño merece una política basada en propuestas y trabajo, no en agresiones y mentiras», enfatizó.
Zdero aseguró que su gobierno seguirá adelante con los proyectos previstos, sin distraerse por los ataques. «Tenemos un plan claro para Chaco, y vamos a cumplirlo. Estos intentos de desestabilización no nos van a detener. Nuestra prioridad es el bienestar de la gente», concluyó el gobernador, en un mensaje que busca reafirmar la estabilidad de su gestión ante los embates de la oposición.
El enfrentamiento entre Zdero y Capitanich no es nuevo en la política chaqueña, y estas acusaciones agravan la tensión en un año marcado por la incertidumbre electoral. Sin embargo, el actual gobernador se mostró firme en su postura de no dejarse intimidar por lo que considera un «juego político sucio», y renovó su compromiso con la provincia y su población.