En un día de intensa emoción y trascendencia histórica, el grupo terrorista Hamas liberó a los 20 rehenes israelíes que aún permanecían con vida en su poder, poniendo fin a un calvario de 738 días de secuestro en la Franja de Gaza. El hito se concretó en el marco de un acuerdo multilateral, negociado con la mediación de Estados Unidos, que establece la entrega total de los secuestrados vivos y la retirada progresiva de las tropas israelíes del territorio palestino.
La liberación se realizó a través de varios puntos coordinados dentro de Gaza. Los rehenes fueron entregados por Hamas a representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), quienes los trasladaron a un punto de encuentro con unidades especiales de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Posteriormente, serán llevados en helicóptero a hospitales designados como Ichilov, Sheba y Beilinson para una evaluación médica y la reunión final con sus familias.
Entre los liberados se encuentran ciudadanos con nacionalidad argentina, como los hermanos David y Ariel Cunio, secuestrados en el kibutz Nir Oz, y Eitan Horn, también de origen argentino. El regreso de estos rehenes pone fin a una pesadilla que se había convertido en un símbolo de la brutalidad del ataque terrorista del 7 de octubre de 2023, que desencadenó el conflicto.
El acuerdo, impulsado fuertemente por la diplomacia estadounidense, también contempla la excarcelación de 250 prisioneros palestinos condenados a cadena perpetua y 1.700 gazatíes detenidos después del 7 de octubre, incluyendo a mujeres y niños. Este intercambio masivo subraya la naturaleza geopolítica de las negociaciones y el alto costo pagado por Israel para garantizar el retorno de sus ciudadanos.
El Dolor por los Rehenes Fallecidos
No obstante, el día no está exento de dolor. El acuerdo estipula también el inicio de la entrega de los cuerpos de los secuestrados fallecidos, que, según lo previsto, comenzará entre la tarde y la noche. Sin embargo, el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas denunció que solo cuatro de los 28 cuerpos de rehenes muertos serán devueltos hoy, calificando la situación como una «flagrante violación» del acuerdo y reavivando la angustia de las familias.
La liberación total de los rehenes vivos y el inicio del proceso de recuperación de los fallecidos marcan un punto de inflexión. Aunque el cese al fuego es un alivio para la población, el proceso de paz sigue siendo frágil. Ahora, el foco internacional se centra en la segunda fase del plan, que deberá abordar la reconstrucción de Gaza y la búsqueda de una solución duradera en la región, un camino que requerirá un compromiso político y diplomático sostenido por parte de todos los actores.